Si algo tiene el cine es que coge referencias de todo tipo de arte. Podemos visualizar toques sobre la pintura, el teatro o a la escultura. Hoy hablaremos de la antigüedad, más en concreto del mito del viaje del héroe, donde el cine se ha basado en innumerables ocasiones para poder crear una historia atractiva.
De forma muy resumida, el protagonista tiene que hacer un viaje de “madurez” cuando reciba la llamada a la aventura, encontrará enemigos por el camino (donde habrá un mentor que le guíe), y finalmente regresará a casa con la gloria en sus bolsillos después de superar el desafío final. Durante el viaje, también habrá una etapa donde morirá, pero al ser el elegido, resucitará de cara a la batalla.
El señor de los anillos
Una saga que habla sobre este tema universal es El Señor de los Anillos (e incluso El Hobbit), donde Frodo tiene que emprender un viaje cuando recibe la llamada de llevar el anillo al Monte del Destino (la recibe de forma indirecta, ya que el acepta el reto por sí mismo).

Durante toda esta etapa, junto a Sam, madurará y se encontrará con muchos enemigos, tendrá también aliados y el mentor que le ayudará será Gandalf. Emprenderá todo un viaje durante tres películas hasta que llegue al Monte del Destino y tire el anillo para librar del mal a todos. Volverá a La Comarca a hacer su vida normal, feliz, con sus amigos, y disfrutando de los pies descalzos en la tierra de su propia casa.

Harry Potter
Más largometrajes, que también vienen de libros por cierto, es la saga de Harry Potter, donde su autora, J.K. Rowling, también basa la estructura argumental en el mito del viaje del héroe. Harry Potter es el elegido para vencer a Voldemort, del que sobrevivió ya una vez.

Es el único que puede vencerle por lo que tendrá que aceptar la llamada sí o sí. Emprende un recorrido de madurez donde se enfrentará a adversarios que suelen desembocar en “el que no debe ser nombrado”.
Su mentor será Dumbledore y sus fieles aliados Ron Weasley y Hermione Granger. La historia todos la conocemos, conseguirá ganar la batalla final a Lord Voldemort en una guerra que quedará en los archivos videográficos del cine.

Matrix
No solo las películas “pseudoinfantiles” tienen este mito presente. Por ejemplo, en Matrix, también podemos ver esta estructura. En este caso, Anderson, el protagonista, rechaza la llamada en una primera ocasión ya que no cree a la misteriosa Trinity.
Aceptará el reto con la famosa escena de las dos pastillas, donde elegirá la que le transporte a la oscuridad, a un mundo desconocido. Su mentor será Morpheo, el que le ofrece poder ver esas nuevas tierras.

Tendrá que ir superando obstáculos hasta que por fin llegue la prueba final, donde tendrá que vencer con la ayuda de una aliada, de Trinity. Asimismo, al igual que en Harry Potter, Anderson morirá durante este viaje, pero como es el elegido, resucitará para vencer al mal, a Smith.

El mito del viaje del héroe
Este camino de madurez, con aliados, obstáculos, muertes, mentores y más, podremos encontrarlos en otros filmes como Star Wars,Men in Black, Indiana Jones, Aladdino El Mago de Oz.
Parece increíble, pero el mito del viaje del héroe podríamos verlo en más y más historias, ya sea en la religión (por poner un ejemplo, según la Biblia, Jesucristo recibe la llamada, tendrá enemigos, aliados, morirá, resucitará y en un final será el que salve a todos) o en la política, donde una persona de la oposición al gobierno es llamada por su partido a salvar a un país donde gobierna el “enemigo” (ya sea derecha, centro o izquierda).

Madurará desde joven hasta que tenga que enfrentarse en una batalla final donde solo puede quedar uno, donde el escenario, lógicamente, serán las urnas. Ya lo dijo Batman: “O mueres como un héroe, o vives lo suficiente para verte convertido en el villano.” Viéndolo desde esta perspectiva, es mejor morir siendo héroe, ya que tendrás que resucitar sí o sí.