Roadtrip por las Highlands

Escocia está dividido en dos, las tierras bajas o Lowlands y las tierras altas o Highlands. Las Highlands pueden presumir de tener unos de los paisajes más espectaculares del mundo además de que son unas tierras repletas de historias. Es una zona plagada de montañas, colinas, naturaleza y cómo no, castillos.

Las Highlands no tienen una gran población, de ahí que sus paisajes se hayan mantenido en gran parte vírgenes. ¿Te apuntas a descubrir castillos encantados, lagos repletos de monstruos y carreteras interminables?

North Coast 500

Es el equivalente a la Ruta 66 pero en Escocia, un viaje que se debería hacer en tres semanas, como mucho dos, para poder ver todo tranquilamente. Lo ideal es hacer el roadtrip en una semana y media dos y dejar el resto de días sobrantes para visitar ciudades como Glasgow y Edimburgo.

Inverness

Es la capital de las Highlands y es dónde podrás visitar los míticos sitios de Escocia, como el Lago Ness, la Cascada de Foyers o el Parque Nacional de Cairngorms. Este último suele ser muy poco visitado a pesar de lo impresionante que resulta. Si vas en verano que no te extrañe ver la nieve por los Cairngorms, además de bosques y fauna salvaje.

Además de paisajes naturales te recomendamos que visites el museo de Inverness, que además tiene una galería de arte donde podrás conocer la historia del canal Caledonia y adentrarte en el estilo de vida de esta zona. En la Calle Church Street se concentran todos los atractivos turísticos.

North Kessock

Este pequeño pueblo está a tan solo cinco kilómetros de Inverness. Lo más destacado de este lugar son los delfines, sí delfines en Escocia. De hecho puedes visitar el “Dolphin and Seal Center” para conocer más acerca de cómo llegaron los delfines a esta zona, es precioso.

No te puedes perder los pozos de Clootie, son unos manantiales rodeados de árboles que tienen atados en las ramas telas. Esto se debe a que se trata de un lugar de curación, mucha gente con enfermedades acude a estos lugares para curarse.

West Knochbain

Es una zona donde apenas encontrarás actividades de ocio, pero ver este paisaje merece la pena. Es un paisaje precioso, a la derecha queda West Knochbain y a la izquierda Muckernich Wood. Las mejores vistas a la costa y a la “Black isle” las tenéis desde el restaurante Storehouse of Foulis, además de que podrás disfrutar de la gastronomía típica.

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Durness

Último destino, Durness. Esta zona se caracteriza por tener unas playas y unos acantilados asombrosos, además de las cuevas Smoo. 

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Estas cuevas tienen muchas historias que contar por lo que si tienes tiempo es recomendable que las visitéis en profundidad, se puede acceder en barca, aunque eso sí hay que pagar para entrar en ciertas zonas, pero merece la pena. Estas zonas de agua salada son muy atractivas para las focas y aves.

Este es un pequeño itinerario de un viaje por las Highlands, pero, obviamente, hay mucho más que ver. Además, la ruta del viaje depende mucho del tiempo y la época del año en la que se viaja. ¡No te pierdas este paraíso e imprégnate en la cultura celta!